Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural

Un cuento, dos poemas y una polifonía de homenajes al universo del libro en once vídeos

De los poetas Ida Vitale y Nuno Júdice al librero debutante Antonio Almeida, el Micro de la Feria de Madrid da voz a quienes se dedican al ecosistema de la creación literaria

Hay poemas, experiencias y reflexiones que merecen ser contadas por lo alto. Situado frente a las casetas, al aire libre, está el Micro de la Feria: un micrófono que se escucha por los alta voces que recorren el kilómetro largo del Paseo de Los Coches, del Parque del Retiro, donde está situada la 76ª Feria del Libro de Madrid. Allí, todos los días, de estos 17 días de feria, a las doce horas, por esos micrófonos se escucha la voz de narradores, poetas, filósofos, editores, libreros, periodistas…

Una polifonía de voces con un tema en común: el universo del libro. Un minuto en el cual las palabras de estos invitados rinden homenaje a una pasión y dan las gracias.

“Tengo en las manos la condición humana, los granos / de polen que las abejas dejaron caer en las mesas / de los cafés, el peso de una angustia que no basta / para equilibrar un poco de polvo en la balanza / del ser”, este es el inicio del poema La condición humana, que inauguró el micro de la 76ª Feria del Libro de Madrid, el pasado 27 de mayo. Fue leído en portugués por su propio autor, el poeta portugués Núno Júdice. Desde 2014 la Feria del Libro de Madrid ha reabierto el Micro de la Feria, un espacio que desde la primera edición, en 1933, en ese entonces en el Paseo de Recoletos, dispuso un micrófono frente a la iglesia de San Pascual para divulgar los discursos de las autoridades y que, día tras día, los escritores del momento también fueron tomando la palabra.

La voz suave y apacible de la poeta uruguaya, Ida Vitale, Premio Reina Sofía 2015, también se escuchó, como notas musicales, de un extremo al otro de la Feria:

“Mi homenaje / al que plantó cada árbol / sin pensar, para siempre. / O acaso imaginando al desunido / que un día lo convoca, / lo celebra…», es el poema Mi homenaje, que leyó junto con Nuevas obligaciones, incluidos en el poemario Mella y Criba (Pre-Textos, 2010).

Cada día, desde el sábado 27 de mayo hasta el domingo 11 de junio, también han ido tomando la palabra el escritor español Jordi Sierra i Fabra, la fundadora de la librería Mariguano, Pepa Ortega, el librero Antonio Almeida de la librería Molar, la editora de Turner Pilar Álvarez, la directora del CERLALC, Marianne Ponsford, la directora de la Feria Internacional del Libro de Guadalajara (México), Marisol Schulz, el director de la Feria del Libro de Buenos Aires, Oche Califa, la directora de la Feria del Libro de Bogotá, Sandra Pulido y el director de la Feria del Libro de Lima, José Carlos Alvariño.

Mejor veámoslos, escuchémoslos, en el Micro de la Feria:

Núno Júdice en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Nuno Júdice

“TENHO nas mãos a condição humana, os fios / de pólen que as abelhas deixaran cair nas mesas / dos cafés, um peso de angústia que não chega / para equilibrar um grão de pó na balança / do ser. Pudesse eu amassá-la como se faz à farinha, / dar-lhe a consistencia do pão que vai ao forno, / e tirá-la ainda quente, na pá do poema, para a distribuir / à mina volta. Quantas fatias de condição / humana se poderian cortar! Os homens / levá-las-iam nos bolsos, ainda fumegantes, / escondendo-as dos pendintes; e os pássaros /apanhariam os restos, com os seus bicos exangues / de um voo inversal. Mas ponho o pão à mina / frente, e deixo-o arrefecer, vendo a condição humana / evaporar-se como o fumo. «Para que queres o pão?», / perguntam-me. Abri-lo-ei à noite; e comê-lo-ei / frio, saboreando a dura côdea da condição humana”.

Jord Sierra i Fabra en el Micro de la Feria del Libro de Madrid

Jordi Sierra i Fabra

“A vuestra edad, yo leía un libro al día y leer me salvó la vida. Era un mal estudiante, no era brillante, era tartamudo, no podía hablar con nadie, pero leer un libro al día me dio la cultura que tengo y además superé hasta la tartamudez. Leyendo se aprende a vivir, a pensar. Me siento honrado de formar parte de esta familia”.

Pepa Artega en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Pepa Arteaga

“Recuerdo a Martín Gaite llegando a la Feria con una alegría desbordada para encontrarse con sus lectores. La emoción de ver sentado en estos mismos bancos del Retiro a José Hierro o de ver a Carmiña Martín Gaite, llegando a firmar a la caseta con una alegría desbordada ante la oportunidad de encontrarse cara a cara, corazón a corazón, con sus lectores. Los cambios tecnológicos y sociales de los últimos años nos han facilitado la relación y la comunicación con los lectores, mejorando y transformando en gran medida nuestro trabajo. Lo que se mantiene intacto desde 1977, después de cuatro décadas, es nuestro empeño inicial: manifestar el papel imprescindible del libro en el conocimiento. Borges: De los diversos instrumentos inventados por el hombre, el más asombroso es el libro; todos los demás son extensiones del cuerpo. Sólo el libro es una extensión de la imaginación y la memoria”.

Winston Manrique Sabogal en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Winston Manrique Sabogal

“La historia de un coronel envejecido al que no le escribían para recibir la pensión sería la mejor carta de recomendación de un escritor desconocido llamado Gabriel García Márquez. Era 1965 y Luis Harss preparaba su libro Los nuestros, donde buscaba reunir a los diez autores latinoamericanos más representativos del momento, cuando leyó El coronel no tiene quien le escriba, del narrador colombiano. No tuvo dudas, y lo incluyó junto a grandes como Borges, Guimarães Rosa, Rulfo, Onetti y nombres emergentes como Cortázar, Fuentes y Vargas Llosa. Un año más tarde, Francisco Porrúa, editor de la argentina Sudamericana, leyó Los nuestros y preguntó a Harss por ese tal García Márquez. Harss le dio aquella novelita de apenas cien páginas. Porrúa la leyó. Supo que tenía que publicarla junto al resto de lo que tuviera escrito aquel desconocido. Llamó a García Márquez a Ciudad de México para pedirle los derechos. La respuesta fue un ‘no’, porque ya estaban cedidos. A cambio, el novelista le dejó caer que estaba terminando una novela. Así es que el martes 30 de mayo de 1967, tal día como hoy, Sudamericana terminaba de imprimir Cien años de soledad, una de las obras clásicas del siglo XX. Lo que vino después ya es historia. Este episodio de las vísperas del éxito de un gran libro ilustra la importancia de contar con buenos editores, aquellos que saben ver el talento y lo novedoso, que apuestan, que arriesgan y publican contra las tendencias y las modas. Son un ejemplo de valentía, porque nadie se hace solo”.

Pilar Álvarez en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Pilar Álvarez

“Este es un homenaje a los visitantes de la Feria. Da gusto recibir la visita de todos ustedes aquí, en el Retiro. Me encanta verles mirando y tocando los libros, me encanta cuando preguntan por un autor que apenas se vende, no me molesta nada que pregunten si vendemos partituras, no nos molesta nada que nos pregunten dónde está la caseta de la competencia, que pidan un libro de hace ocho años y ver a los niños acompañados por sus abuelos o a los alumnos de los colegios. Me encanta cuando los visitantes de la Feria piden que les bajemos un libro de ahí arriba, y cómo lo miran, cómo leen la solapa, cómo le dan la vuelta varias veces. Me admira verlos cargados ya con varias bolsas y cómo se paran aunque les tiren de la manga. Me llena de esperanza que pregunten por el título menos vendido: traemos a la Feria el título menos vendido porque siempre hay quien pregunta por él. Me hacen gracia los libros de presentadoras, de curanderos y de influencers; me alegra mucho que quieran escribir un libro y venir a la Feria. Da gusto abrir la feria y verlos comprar libros y da gusto cerrar la feria y ver todo el parque lleno de gente con la bolsa al lado, gente que saca el libro que acaba de comprar y se sienta debajo de un árbol, niños que se apoyan en las casetas cerradas leyendo sus tebeos nuevos; da gusto verlos en las terrazas enseñándose unos a otros sus libros nuevos. Me encanta la Feria del Libro de Madrid y me encanta verles a todos ustedes en la Feria”.

Marisol Schulz en la Feria del Libro de Madrid

Marisol Schulz

“Celebro que lo que nos convoque sea algo tan noble como el libro, tan noble como la lectura. He vivido de, por y para el libro. Mi misión profesional ha sido la promoción de la lectura. Soy una entusiasta de la formación de lectores. Quizás por eso soy la directora de una feria del libro dedicada fundamentalmente a promover la lectura en español, pero también en cualquiera de sus formas e idiomas. Las ferias del libro cumplen una misión muy especial y gracias a ellas estamos hoy aquí en una mañana soleada de Madrid. Gracias a ellas más de 800.000 personas van año con año a México, van a participar en esta fiesta colectiva de las letras. Mucho se ha hablado de la muerte del libro. Quienes trabajamos alrededor de ellos estamos ciertos que el libro no va a morir. Ver el Retiro, ver lo que aquí sucederá el fin de semana, son muestras contundentes de que el libro tiene una larga existencia y coexistencia con otros formatos. Los invito a seguir leyendo, a acercarse a la lectura en cualquiera de sus formas y, muy particularmente, a visitar México y la ciudad de Guadalajara”.

 

Oche Califa en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Oche Califa

“Vengo de un país que estima los libros, que no sólo se ha interesado por sus propios libros y autores, sino también por los libros del mundo Hay que aprender la lección de Geppetto, que cambia el saco por el libro que necesita Pinocho. Esta fue una de las obras que las inmigraciones masivas y pobres trajeron a Argentina. Nos encanta su indisciplina, pero también su curiosidad. Yo creo que en Argentina fue bien leído este pasaje. Y estoy especialmente orgulloso de esa realidad. Sé que hay muchísimos argentinos que en lugar de descender en el centro comercial, a dos paradas de metro de la feria, lo hacen en la feria. Lo que quiere decir que han aprendido la lección de Pinocho: han cambiado el saco por el libro”.

 

Sandra Pulido y José Carlos Alvariño en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Sandra Pulido y José Carlos Alvariño

“Que el hombre cumpla lo que de niño prometió”, frase de Hölderlin. La encontré en un libro que me marcó la vida: el ensayo del escritor argentino Ernesto Sábato La resistencia. Así son los libros, un amigo fiel, un compañero de vida, un refugio y un lugar de encuentro”. Estoy impresionada con el mar de gente que viene, curiosa. Los animo a seguir construyendo y fortaleciendo esa relación con el libro y la lectura”.

“Veo familias, mamás y papás con chicos pequeños, a los que les enseñan libros y que les dicen que por la noche lo leerán juntos. No hay introducción a la lectura más importante que ese momento mágico en que te sientas con tu padre o tu madre a revisar las páginas de un cuento. Lean a sus hijos, a sus sobrinos, a sus primos, a sus nietos, a sus amigos, a sus enamorados”.

Marianne Ponsford en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Marianne Ponsford

“La Feria del Libro es un paréntesis entre dos soledades necesarias: la del escritor y la del lector. Ese paréntesis es un evento extraordinario. Las ferias, en general, requieren un trabajo monumental y su éxito consiste en que ese trabajo no se vea. Sin embargo, no importan cuánto hagan los editores, cuánto hagan los libreros, cuánto hagan los organizadores de una feria; el verdadero éxito de una feria está en los lectores. Es maravilloso cómo los madrileños, los gatos rojos, se apropian de esta feria. No es de nadie más la feria que de ellos, de ustedes los madrileños que están aquí, para poder hacer de puente entre esas dos necesarias soledades”.

Ida Vitale en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Ida Vitale

“Mi homenaje / al que plantó cada árbol / sin pensar, para siempre. / O acaso imaginando al desunido / que un día lo convoca, / lo celebra. / A lo que no obstante el mediodía, / se da en glorioso atardecer. / A todo lo que ocurre / sin ser más que eso: algo. / Al conductor del ómnibus, / cumplido, sonriente, / que levanta una tarde / con su simple saludo. / Al pájaro que pía. / A quien en su país desvencijado / ose decir su parecer riesgoso. / Al que en el valle / recuerda que hay montañas / y en una gota de agua, / olvidando la niebla, / tiembla ante la sequía / y el desierto ofrecido. / Al banco cuya húmeda madera / me acoge y me refresca, / mientras el tormentoso verano / no da tregua. / Al hueco que busca / colmarse pese al vértigo / y a la gaita que llama a soledades / desde un acantilado. / Al que se acuerda de mí. / Al que me olvida”.

Antonio Almeida en el micro de la Feria del Libro de Madrid

Antonio Almeida

“Ver la feria desde el otro lado es una experiencia preciosa. Me están fascinando un montón de cosas, ver tanta gente, mucha gente joven, el trato con los clientes. Leas lo que leas, independientemente de la temática, te ayuda a pensar, te hace pensar con la cabeza de otro, la del autor o autora del libro, y te hace conocer otras realidades que a lo mejor tú no puedes conocer”.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter ·