Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural Apoya a WMagazín como mecenas cultural

Detalle de la portada del libro ‘Ahora y en la hora’, de Héctor Abad Faciolince (Alfaguara). /WMagazín

La literatura como instrumento para contar y evitar la guerra y promover la paz

FOTOBITÁCORA El tema de los conflictos armados y su reflejo en los libros ocupa un lugar especial en la Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo) 2025. El mundo parece emboscado por guerras. De ello hablaron autores como Héctor Abad Faciolince, Clara Usón o Kirmen Uribe

Cuando se cumplen ochenta años del fin de la Segunda Guerra Mundial, el mundo está emboscado de conflictos: desde la de Ucrania hasta la de Gaza. La literatura las narra y deja su testimonio, al tiempo que sirve como memoria, refugio, consuelo, resistencia y esperanza. Y, sobre todo, como vía para la reconciliación y la paz. Un tema muy presente en la 37ª Feria Internacional del Libro de Bogotá (FILBo), del 25 abril al 11 de mayo.

***

Vida y guerra en Ucrania

La FILBo rindió homenaje a las víctimas de la guerra de Rusia contra Ucrania, en el evento La voz de la literatura ucrania en la guerra, al que asistieron Rostyslav Kalatsynskyi, presidente de la Asociación Ucraniana en Colombia Prosvita, y Olena Palamarchuk, secretaria de la junta directiva de la misma organización.

Entre los libros presentados estuvieron las novelas Abejas grises, de Andrei Kurkov, una novela ambientada en Malaia Starogradovka, y Un hogar para Dom, de Victoria Amelina (asesinada en un bombardeo ruso), que aborda los conflictos ucranianos desde la mirada de un perro en tiempos de posguerra. Además, dos poemarios: A mi hija, de Pavlo Oleksandrovych Vyshebaba, un poema escrito por un soldado ucraniano en respuesta a una carta de su hija pequeña durante la guerra, y The Complete Kobzar, de Taras Shevchenko, una antología poética del autor considerado el padre de la literatura moderna ucraniana.

***

De izquierda a derecha: Héctor Abad Faciolince, Marta Rebón y Antonio Monegal, en la mesa redonda Literatura y conflicto,, en el Pabellón de España, en la FILBo 2025. /WMagazín

Sobrevivir a la muerte y contarlo

“Este libro es el relato de mi solidaridad con Ucrania y de mi obsesión con lo que debió ser el lugar y la hora de mi muerte”, admitió Héctor Abad Faciolince. El escritor colombiano sobrevivió al ataque de un misil ruso en Kramatorsk, en el Donetsk, donde resultaron heridas 62 personas y murieron trece, entre ellas la escritora ucrania Victoria Amelina, con la que estaba el autor colombiano y con quien acababa de intercambiar la silla en la pizzería donde departían. Esa experiencia la relata en Ahora y en la hora (Alfaguara), un libro conmovedor sobre el milagro y la belleza de vivir, pero también sobre el dolor y la incertidumbre de vivir y sobrevivir a la muerte y las injusticias y la sinrazón del ser humano para generar violencia.

“Un viejo, que estaba medio harto de la vida, se siente culpable de sobrevivir en esas circunstancias”, confesó Abad Faciolince en la presentación de su libro en la FILBo y en la mesa redonda Literatura y conflicto, en el Pabellón de España.

Escribir este libro no fue fácil porque, recordó el autor, quien debía estar en el asiento donde estaba Amelina era él. “Las palabras no me salían”, reconoció, pero, añadió, “Victoria Amelina, de algún modo, ya que ella no podía hablar, me ayudó a contar; así como mi papá me ayudó a contar El olvido que seremos”. La escritora ucrania, agregó Abad Faciolince, “es una víctima evidente de la lucha por la libertad de expresión, por las libertades en general. Y por la democracia”. Por eso, afirmó, “yo sentía, por primera vez, desde El olvido que seremos (sobre el asesinato de su padre en Colombia), la responsabilidad y la obligación de escribir un libro. Tenía que darle voz a una persona que perdió la voz, que perdió la mente y que perdió la vida frente a mí”.

Héctor Abad Faciolince estuvo en aquel momento fatídico de 2023 cuando aceptó la invitación de presentar la traducción de El olvido que seremos en la Feria del Libro del Arsenal, en Kiev. Luego viajó con la escritora Victoria Amelia, el colombiano comisionado del acuerdo de paz de su país, Sergio Jaramillo, y la corresponsal colombiana en Oriente Próximo y Ucrania, Catalina Gómez, a conocer un poco la zona en guerra de Donetsk y el Donbás, donde los sorprendió el ataque ruso.

***

Paz y reconciliación

España, como País Invitado de Honor, y su lema Una cultura para la paz, ha abordado el tema de la guerra y la violencia en mesas redondas como Hacer las paces. Participaron el narrador y poeta vasco Kirmen Uribe y el profesor colombiano de Derecho Felipe Rey Salamanca, con reflexiones acerca de la paz y cómo está presente en la literatura en contraposición a las violencias.

Kirmen Uribe recordó que su libro La vida anterior de los delfines es una obra de reconciliación, de reflexión sobre el papel de la memoria histórica en contextos rurales. Rey Salamanca evocó la manera como la violencia marcó su niñez: “mi primer recuerdo es el asesinato de Luis Carlos Galán (candidato a la presidencia de Colombia, en 1989)”. También resaltó dos hitos de reconciliación en Colombia: la Constitución de 1991 y el Proceso de Paz de 2016.

***

De izquierda a derecha: Clara Usón, Marta Carnicero y Antonio Monegal, en la mesa redonda Novelar una guerra ajena, en el Pabellón de España en la FILBo 2025. /WMagazín

La guerra de los balcanes

“Con Bosnia empezó la guerra en la que los civiles son las víctimas”, analizó Clara Usón, autora de La hija del Este. La novela indaga en los motivos que llevaron al suicidio de la hija del general Ratko Mladic, jefe de Estado Mayor del Ejército de la República Srpska en la Guerra de Bosnia (1992-1995) y condenado por crímenes de guerra y genocidio (asedio a Sarajevo y masacre de Srebrenica) por el Tribunal Penal Internacional para la antigua Yugoslavia.

La guerra de los Balcanes tiene un nicho especial en el canon literario español con autores como Juan Goytisolo o Arturo Pérez-Reverte, recordó Antonio Monegal en la mesa redonda Novelar una guerra ajena, en la que participó, también, Marta Carnicero. El motivo de ese interés de los autores españoles por esa guerra, según Clara Usón, estaría en que tanto esos países de la antigua Yugoslavia como España tuvieron dictadores: “Mientras en España tras la muerte de Francisco Franco, en 1975, se creo la llamada Transición y nadie se mató y llegó la democracia, en Yugoslavia todo implosionó. Y porque ese conflicto de los Balcanes, iniciado en 1992, fue la primera guerra en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, la vimos muy cerca, nos sentimos más cercanos a los yugoslavos”.

***

Suscríbete gratis a la Newsletter de WMagazín en este enlace.

Te invitamos a ser mecenas de WMagazín y apoyar el periodismo cultural de calidad e independiente, es muy fácil, las indicaciones las puedes ver en este enlace.

Descubre aquí las secciones de WMagazín.

 

Winston Manrique Sabogal

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter · Suscríbete a nuestra newsletter ·